LAS NUEVAS DE GRAN GOZO
Había pastores en la misma región, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño. Y he aquí, se les presentó un ángel del Señor… Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo. Lucas 2: 8-10.
A causa de que no hay nadie entre los hijos de la humanidad que anuncie el advenimiento del Mesías, ahora los ángeles deben cumplir esa tarea, que era el honroso privilegio de los seres humanos… Los humildes pastores, que cuidan sus rebaños de noche, son los que reciben gozosamente su testimonio… Al principio, no disciernen las miradas de ángeles congregadas en el cielo. El brillo y la gloria de la hueste celestial iluminan y glorifican toda la pradera…
Los pastores se llenan de gozo y, mientras va desapareciendo la brillante gloria y los ángeles regresan al cielo, todos refulgen con las buenas nuevas y se apresuran para buscar al Salvador. Encuentran al infame Redentor, según habían testificado los mensajeros celestiales, envuelto en pañales y acostado en la estrechez de un pesebre. Los eventos que acababan de ocurrir han dejado impresiones indelebles en sus mentes y sus corazones, y están llenos de asombro, amor y gratitud por la gran condescendencia de Dios hacia la familia humana al enviar a su Hijo al mundo —Review, and Herald, 17 de diciembre de 1872.
Tomado de: Meditaciones Matinales para Adultos 2013
“Desde el corazón” Por: Elena G. White
“Desde el corazón” Por: Elena G. White
No hay comentarios:
Publicar un comentario